¿Sientes que planificar tu año como interiorista o decoradora es abrumador? Entre los proyectos, los clientes, las visitas a obra y los constantes fuegos que apagar del día a día, es fácil sentirse perdido en el caos. Y es difícil sacar hueco para planificar el año o incluso cumplir con esa planificación a lo largo del año.

En este artículo, te quiero guiar paso a paso para que te resulte más fácil planificar tu año y sobre todo para que puedas cumplirlo de forma fácil a lo largo de los siguientes meses y como consecuencia, que puedas ver resultados.

Puedes seguir leyendo o escucharlo en este episodio de mi podcast ‘Brandiorismo’ pinchando aquí. O a través del siguiente reproductor.

1_ ¿Por qué es importante planificar tu año como interiorista?

Como interiorista, tu negocio depende tanto de tu creatividad como de tu capacidad para organizarte. Una planificación adecuada no solo te ayuda a organizar los proyectos de diseño de interiores o decoración de tus clientes, sino que también te permite tener tiempo para trabajar en tu propia marca de interiorismo para seguir creciendo con ella. Con una buena planificación anual vas a poder:

• Enfocarte en las tareas que realmente importan.
• Reducir el estrés al tener un mapa claro de tus objetivos.
• Evitar la frustración de sentir que trabajas mucho pero avanzas poco.

2_ Cómo definir objetivos claros para tu negocio de interiorismo

Cuando se trata de hacer planes, lo primero que solemos hacer es escribir listas interminables de tareas, ¿verdad?

Pero te voy a dar un consejo clave: NO empieces por ahí.

Comienza con una pregunta poderosa:

¿Qué quieres conseguir con tu estudio de interiorismo este año?

Quizá quieres:

• Que tu marca sea percibida como una marca referente dentro del sector del interiorismo y la decoración
• Atraer clientes que valoren tu trabajo y estén dispuestos a invertir en tus servicios
• Posicionarte como la opción preferida para tus clientes ideales
• Ganar confianza y seguridad para poder vender tus servicios con confianza, al precio que merecen y sin miedo a que te digan que no. 

Apunta en un papel o en tu libreta esa lista de objetivos que tienes con tu estudio de interiorismo para este próximo año.

Y cuando tengas esa lista, puntúa y ordénala por orden de importancia para ti.

Cuando la tengas, subraya la que ha quedado en primer lugar (no te recomiendo que subrayes más de un objetivo por año).

Vamos a centrarnos en ella.

2.A_ El primer paso para una planificación efectiva es: definir tu objetivo

Pero, ojo: no basta con soñarlo. Necesitas convertir estos deseos en un plan accionable.

El primer paso para una planificación efectiva es definir objetivos que sean específicos, medibles y alcanzables. Aquí es donde entra en juego el método SMART, adaptado a interioristas:

• S (Específico): ¿Qué quieres lograr exactamente?
• M (Medible): ¿Se puede medir?
• A (Alcanzable): ¿Es realista según tus recursos actuales?
• R (Relevante): ¿Se alinea con tu visión de negocio?
• T (Temporal): ¿Cuál es tu fecha límite para conseguirlo? ¿Cuándo quieres alcanzarlo?

Un ejemplo de un objetivo SMART sería por ejemplo:
«Atraer a 5 nuevos clientes que valoren mi trabajo y estén dispuestos a invertir en proyectos de interiorismo con un presupuesto mínimo de [X cantidad] antes del 30 de junio de 2025.»

Este tipo de objetivo es claro, concreto y te ayuda a mantenerte enfocada durante todo el año.

3_ Pasos para crear un plan anual que funcione

Para convertir tus objetivos en realidad, necesitas un plan concreto.

Aquí viene la clave: no te detengas en escribir el objetivo. Para que tenga impacto, necesitas bajarlo a tierra todavía más.

Pregúntate:

¿Qué acciones específicas necesitas llevar a cabo para alcanzar este objetivo?

Para ello haz una lista de pasos pequeños y claros para conseguir ese objetivo que has definido. Por ejemplo:

• Si lo que quieres atraer con clientes que valoren tu trabajo y estén dispuestos a invertir, el primer paso sería definir bien quién es tu cliente ideal para saber como atraerlos.
• El segundo paso sería investigar dónde encontrarlo para saber donde está y así poder llamar su atención.
• El tercer paso podría ser ajustar tu comunicación a ese cliente ideal para conseguir atraerlo.
• Y un último paso, por ejemplo, podría ser, analizar que colaboraciones puedes hacer con otros profesionales que se dirijan a tu mismo cliente ideal para aumentar tu visibilidad y llegar más fácilmente a ese cliente redondo para ti.

Cuando ya tengas esa primera lista hecha. No te quedes ahí. Tienes que disgregar cada paso en piezas aún más pequeñas que puedas llevar a cabo fácilmente.

Solo vas a tomar acción y a hacer aquello que te parezca sencillo de realizar. Si te pones objetivos genéricos, grandilocuentes y muy grandes no vas a tomar acción porque no vas a saber ni por donde empezar y lo vas a abandonar a la primera de cambio.

Por ello tienes que subdividir cada idea en las partes más pequeñas que puedas para que no te cueste realizarlas. A veces debe ser tan sencillo que te parezca hasta ridículo, pero solo así no lo postergarás.

3.A_ Haz que la acción sea sencilla y manejable

El error más común al planificar es fijarse objetivos enormes y no saber por dónde empezar. Aquí te dejo algunos consejos para empezar de manera efectiva:

a) Divide los objetivos en tareas pequeñas.

¿Cómo lo puedes convertir en pasos más pequeños y manejables que puedas llevar a cabo en un tiempo determinado?

Si tu meta es definir bien quién es tu cliente ideal. Podrías por ejemplo subdivirdirlo así:

• • Paso uno: buscar por internet 3 profesionales que podrían ayudarme (media hora)
  • Paso dos: pedir precio y disponibilidad por email a esos profesionales (15 minutos)
  • Paso tres: hacer una comparativa de los 3 profesionales (30 min.)
  • Paso cuatro: elegir con que profesional trabajar (15 min.)
  • Paso cinco: escribir un email para agendar una cita con esa persona (10 min.)

Cada uno de estos pasos es concreto, tiene un propósito claro y se puede realizar en un tiempo limitado.

b) Ponte plazos realistas.

Calcula cuánto tiempo puede llevarte realizar cada tarea. Pero intenta ser lo más realista posible. Si sabes que te cuesta mucho escribir un email, no lo pongas como una tarea de 5 minutos. Apunta el tiempo que sabes que vas a tardar.

4_ Cómo distribuir tu planificación si eres interiorista a lo largo de tu año

Cuando tengas todos los pasos, tareas y subtareas definidos, entonces, y solo entonces, siéntate delante de un calendario y distribúyelo durante tu año.

Lo primero de todo, con un calendario delante tacha las fechas en las que no trabajas, las fiestas o las épocas en las que trabajas menos horas por motivos personales. Y no te olvides de reservar épocas para descansar.

Cuando tengas claros los días efectivos y reales de trabajo del año, distribuye esas pequeñas tareas que has definido en tus semanas y en tu día a día de una manera realista.

A lo mejor la tarea de un día es mandar un email. ¿Eso podrías hacerlo? ¿Podrías sacar hueco entre las mil cosas que tienes a lo largo del día para mandar ese email?

4.A_ Aprende a adaptarte durante el camino

La planificación perfecta no existe. Habrá imprevistos, cambios y días en los que no logres avanzar como esperabas. En lugar de frustrarte, utiliza estas estrategias:

• Reorganiza tu plan: Si algo no sale según lo previsto, ajusta la ruta.
• Celebra los pequeños logros: Cada tarea completada es un paso más cerca de tu meta.
• Sé flexible: Recuerda que los mejores descubrimientos a menudo suceden fuera de lo planeado.

5_ Lo más importante: Supera las excusas y toma acción

Planificar es solo el principio. El verdadero progreso sucede cuando pasas a la acción. A menudo nos quedamos atrapados en el perfeccionismo o en la sensación de «aún no estoy lista.» Pero aquí está la clave: el cambio ocurre cuando empiezas, aunque sea con un paso pequeño.

Te encuentras diciendo cosas como:

• «Lo haré cuando tenga más tiempo.»
• «Primero necesito más clientes.»
• «Cuando termine este proyecto lo organizaré todo.»

Estas frases suelen esconder miedo o inseguridad. 

No necesitas esperar al momento perfecto para actuar. Haz algo, por pequeño que sea.

Piensa en tu planificación como si fuera un viaje. Un viaje en el que vas a disfrutar del proceso, del camino. No quiero que te centres en el objetivo todo el rato. Ya tienes la ruta, ahora empieza a andar y deja que el proceso fluya, pero haciendo.

Si vas de viaje y está en obras ese museo que querías visitar, que ese hecho no ensombrezca el viaje entero. Reorganizas la ruta y llenas ese hueco con otra cosa o te paras a tomarte un café y a disfrutar de otra manera diferente. Con tu planificación debe ocurrir lo mismo. A veces en esos cambios de rumbo descubrimos algo que no esperábamos y nos aporta una visión nueva. Pero para hacer ese viaje debes primero organizarlo y después subirte al avión.

Si lo organizas y luego no vas al aeropuerto no sirve de nada. Solo será muy bonito en tu mente pero no lo vivirás.

6_ Conclusión si quieres planificar tu año

Planificar es solo el comienzo. Es el compromiso diario, la claridad y la consistencia lo que te llevará hasta donde quieres estar.

Quieres planificar tu próximo año, pero ¿estás dispuesta a tomar acción?¿o se va a quedar todo escrito en el papel debajo del montón ese de la mesa de cosas por hacer?

Recuerda: el futuro que deseas comienza con las decisiones que tomas hoy.

Pero las decisiones no se llevan a cabo si no las pones en marcha con un pequeño primer paso y tomando acción. Y para tomar acción te lo debes poner fácil y cada tarea debe ser pequeña y manejable.

El crecimiento estratégico no ocurre por accidente, ni por cuestión de suerte como nos han vendido. Sucede cuando tienes un plan claro y te comprometes a seguirlo con coherencia y sembrando cada día.

     Dime, ¿qué pasos vas a dar este año que viene para acercarte a tus objetivos?

Si sientes que necesitas alguien que te acompañe y te guíe a la hora de definir tu marca, tu cliente ideal o tu diferenciación, estoy aquí para ayudarte.

Puedo acompañarte durante varios meses en un programa completo y personalizado de marca personal para interioristas; o podemos vernos en una sola sesión estratégica y trabajar esos primeros pasos para que tu año sea sinónimo de acción y no solo de planificación.

Escríbeme a pinchando aquí y te explico cómo podría ayudarte.

A veces solo necesitamos que alguien se siente con nosotras, y con su experiencia y sus conocimientos nos ayude a comenzar con ese primer paso y nos dé la claridad necesaria y la seguridad para continuar por nuestra cuenta.

¿Quieres profundizar más en este tema? Escucha el episodio completo en mi podcast.

En él te cuento más consejos y estrategias específicas para interioristas.