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Un Manual de Identidad Visual Corporativa es el manual donde se indican los criterios gráficos de aplicación de una marca y su correcta utilización. Es decir, donde se explica detalladamente el uso del logotipo y toda la imagen visual que se desarrolla a su alrededor (colores corporativos, tipografías, estilo de imágenes,…).
También denominado comunmente Manual corporativo, aunque no es el término correcto, puede ser muy básico y solo contener la información relativa al logotipo y sus variantes, los colores corporativos y las tipografías; o puede ser un documento muy elaborado que contenga desde la papelería corporativa a la rotulación de los vehículos.
Si eres emprendedor y estás comenzando con tu empresa quizá solo necesites un manual corporativo sencillo donde se estipulen las pautas gráficas principales de la marca, y poco más. Con los años podrás ir ampliándolo según las necesidades y el crecimiento del negocio.
Pero es fundamental que cuando te plantees encargar el diseño del logotipo de tu negocio pienses en que este vaya acompañado de un Manual Corporativo. Evitarás muchos problemas en el futuro a la hora de que tu imagen sea reproducida en los diferentes soportes de la forma correcta.
Dependiendo del tamaño de la empresa éste puede ser un manual independiente o puede estar incluido dentro del Manual de identidad corporativa, qué es el documento donde se definenlos criterios de uso en los diferentes medios de la marca.
Además de los elementos gráficos, es decir el manual de identidad visual, el Manual de identidad corporativa debe incluir otros criterios como el estilo o el tono en los que deben escribirse los textos, la filosofía de la empresa, la estética visual de las imágenes o de los medios audiovisuales o las aplicaciones del logo sobre los diferentes soportes.
En Manuales de Identidad Visual más elaborados los apartados que ya he descrito anteriormente se desarrollan en profundidad, siendo tan amplios como grande sea la empresa.
En Manuales más complejos puede incluirse el uso del logotipo sobre uniformes, rotulación de vehículos, banderolas, regalos publicitarios o merchandising.
Hay grandes empresas, que tienen sus Manuales de Identidad Corporativa colgados de forma pública para poder ser consultados, como por ejemplo la NASA o Heineken. Estos serían unos ejemplos de Manuales de Identidad Corporativa bastante amplios.
Pero no es solo importante a nivel interno, sino que lo será también a nivel externo de cara a proveedores o empresas colaboradoras. Si por ejemplo vas a participar en un congreso y tu logotipo va a aparecer en diferentes flyers, carteles y presentaciones es fundamental que les envíes tu Manual junto a tu logotipo para que lo utilicen de la forma correcta y no lo distorsionen o lo cambien de color o forma. Si tienen una guía de estilos gráficos sabrán como utilizarlo y dónde no pueden colocarlo para no dañar la imagen de tu empresa, ellos te lo agradecerán porque les facilita el trabajo y tu imagen aparecerá de la forma correcta.
Además a lo largo de los años adquirirá mayor importancia y te ahorrará tiempo. A lo mejor cuando comenzaste con tu empresa no necesitabas mucho más que un logo, pero con el paso del tiempo puede que gracias al éxito veas como se amplía y quizá necesites un departamento de diseño. Si tienes un Manual de identidad corporativa bien definido y que haya ido creciendo a lo largo de los años con la empresa el nuevo responsable de diseño tendrá todas las pautas bien descritas en él y podrá comenzar a trabajar desde una base sólida.
El Manual de Identidad Visual Corporativa es el manual donde se indican los criterios gráficos de aplicación de una marca y su correcta utilización
¿Eres emprendedor, estás arrancando, y no sabes por dónde comenzar con el diseño de tu imagen? ¿has leído un montón de conceptos pero te cuesta entender bien a qué se refiere cada cosa? ¿sabes qué es un Manual de identidad corporativa? No te preocupes, te explico de forma sencilla los conceptos básicos que componen una marca y qué necesitas saber si estás comenzando.
Generalmente, cuando emprendemos, una de las primeras cosas en las que pensamos es en el nombre de nuestro negocio o empresa, pero es igual de fundamental crear una imagen de marca que lo acompañe. Y puede que hayas leído cosas sobre ello, conceptos como imagen de marca, manual de identidad visual, logotipo, branding o naming. Te voy a explicar de una forma sencilla unos conceptos básicos para que sepas por dónde comenzar y puedas decidir qué es lo que tu negocio necesita.
Se podría definir como el proceso de elección del nombre para una marca a través de diferentes estrategias y técnicas. Hay empresas especializadas en ello que pueden ayudarte si lo necesitas.
Está formado por imágenes o letras, que hace que el consumidor la identifique visualmente. Debe resumir y condensar la identidad corporativa de forma gráfica.
Tener un logotipo profesional aporta muchos beneficios, entre ellos: profesionalidad y credibilidad, reconocimiento visual inmediato, ayuda en la comunicación, etc.
Además es importante que quien diseñe tu logotipo te lo entregue en formato vectorial para evitar problemas futuros de tamaño o de impresión en los diferentes soportes.
Existen varios tipos de logos según sea su diseño: Logotipo, Imagotipo, Isotipo e Isologo.
No sólo gráficamente, sino que agrupa todas las acciones que se realizan para afianzar una marca. Desde el nombre, el logotipo, los valores, el plan de acción e incluso las sensaciones que tiene el consumidor de esa marca.
Al final, es la relación que queda entre la marca y el cliente y todo lo que esto conlleva tanto visual como psicológicamente.
Podéis encontrar sitios donde definan el branding como el diseño gráfico de una marca, pero es un concepto bastante extendido que no es correcto ya que el branding es un concepto mucho más amplio.
La identidad corporativa está formada tanto por los elementos estéticos gráficos (la imagen corporativa, logotipo, etc) como por una parte intangible formada por los valores y la filosofía de la empresa.
La diferencia entre identidad corporativa e imagen corporativa puede ser un poco confusa. Pero podríamos decir que la segunda es la aplicación gráfica de la primera.
Entre ellos está el logotipo, la tipografía, los colores corporativos, etc.
Son los elementos gráficos que hacen visual a una empresa y que crean un recuerdo visual en el espectador para que lo asocie con la marca.
A veces se cree que con un logotipo es suficiente, pero es necesario definir, alrededor de un logotipo, otros elementos como los colores corporativos o las tipografías para que la comunicación sea completa y no haya errores. Por ejemplo, si a la hora de imprimir el logotipo sobre unas tarjetas o un cartel no se tiene el color corporativo exacto, éste puede variar de unas impresiones a otras creando confusión en el consumidor. O, si cada vez se utiliza un tipo de letra, el usuario no lo asociará con la marca creando confusión y dando aspecto de poca profesionalidad.
Se indican las versiones del logotipo, sus proporciones, el área de respeto, los usos correctos e incorrectos del logo, los colores corporativos, las tipografías de la marca, etc.
Puedes encontrar versiones básicas donde solo se indiquen los colores y las tipografías corporativas, o manuales más completos donde se detallan desde los tamaños mínimos a los que puede reproducirse el logotipo, a las pautas a seguir en la rotulación de vehículos.
Es fundamental saber como debe y no debe usarse un logotipo, sobre qué colores puede situarse y sobre cuáles no, para que su visualización sea correcta y su lectura no se vea interferida. El diseñador tiene en cuenta todos estos elementos a la hora de crear un logotipo por lo que es fundamental conocerlos para evitar errores de legibilidad al utilizarlo sobre diferentes soportes o tamaños.
Se integran tanto las indicaciones de uso de los elementos gráficos (el Manual de Identidad Visual corporativa), como las instrucciones concretas de estilo o el tono en la redacción de textos, la estética visual de las imágenes a utilizar o las pautas a seguir en medios audiovisuales o redes sociales.
Digamos que es una ampliación del Manual de identidad Visual corporativa que puede ser tan amplio como la empresa necesite. Y que será un guía imprescindible tanto a nivel interno como externo para asegurar que tu marca se represente de la forma correcta y no sufra variaciones. Si por ejemplo, envías tu logo para que lo incluyan en una publicación externa o a una imprenta para que te impriman unas tarjetas nuevas deberás enviarles el Manual de Identidad para que sepan cuales son las pautas a seguir.
Pero después de varios años de experiencia yo recomendaría como mínimo al comenzar, en cuanto a diseño, tener un Manual Corporativo básico que incluya un logotipo y sus posibles variantes, los colores y las tipografías corporativas.
Quizá con los años sea necesaria ampliarlo e incluir nuevos elementos. Pero para comenzar y tener una imagen visual sólida de partida es fundamental definir bien una imagen corporativa aunque sea sencilla al principio. A partir de ahí se podrá desarrollar cualquier elemento visual que necesite la empresa, desde carteles, rótulos, tarjetas de visita o flyers a incluso la decoración del local o el aspecto de las redes sociales. Teniendo claros los colores, las tipografías y el logotipo todo girará en torno a estos elementos y se conseguirá una base visual firme que aportará profesionalidad y que te podrá acompañar durante años.
¿Alguna vez has sentido la necesidad de destacar dentro del sector del diseño de interiores? ¿Te preguntas cómo transmitir tu esencia única a través de la imagen de tu estudio de diseño de interiores? Quiero guiarte para que sepas cómo diseñar una identidad visual para tu negocio de interiorismo o decoración que refleje tu pasión y te ayude a atraer a los clientes adecuados.
En un mundo donde la imagen lo es todo, tu identidad visual es tu carta de presentación. Es más que una simple imagen; es la esencia de tu marca encapsulada en un diseño que te representa. Para ti, precisamente, que te dedicas al diseño de espacios llenos de vida y personalidad, es crucial transmitir esa misma esencia a través de tu identidad visual, de tu logo de interiorismo.
No te conformes con una imagen genérica que podría pertenecer a cualquier otro estudio. Tu logotipo debe ser una extensión de ti misma, una representación visual de tus valores, tu estética y tu historia. No se trata solo de atraer a cualquier cliente, sino de atraer a tu cliente ideal, a tu cliente redondo, ese que resonará con tu visión y tu estilo único. Ese con el que conectas y con el que vas a disfrutar trabajando.
Existen webs donde puedes crear tu logo online y plantillas gratuitas para crearlo en unos pocos pasos. Generalmente, solo tienes que incluir el nombre de tu empresa y te generará como resultado una imagen estándar. Un logo que podrás encontrar en cualquier otra empresa repetida o muy parecida y, que además, no reflejará en nada ni tu personalidad ni los valores de tu marca. Podría valer tanto para una inmobiliaria como para una tienda de decoración, y por supuesto, tu público objetivo no se verá identificado en él, ni lo recordará especialmente, convirtiéndose justo en lo contrario de lo que debería ser el logo de tu marca de interiorismo o tu marca de decoración.
Debe ser una imagen muy meditada y estudiada donde tanto el color como la tipografía hayan sido pensados específicamente para tu marca, con una personalidad propia, con una historia detrás, tu historia. También debe haber un análisis pormenorizado del público principal al que va a ir dirigido para que sienta identificado con ella y se cree comunidad.
Por eso quiero que veas cuáles son los beneficios de crear tu logotipo con una persona especializada en diseño gráfico, y especialmente con un diseñador de imagen corporativa y branding.
Este enfoque personalizado garantizará que tu logo refleje fielmente la esencia de tu marca y te ayude a destacar entre la competencia, transmitiendo una imagen profesional y coherente con tus valores y tu cliente redondo.
Un logotipo profesional, y todo lo que hay detrás de éste, puede ser el catalizador que impulse tu marca de diseño de interiores al siguiente nivel. No solo proyecta una imagen de calidad y profesionalidad, sino que también genera confianza entre tus clientes potenciales. Un logo bien diseñado puede ser el faro que atraiga a aquellos que buscan exactamente lo que ofreces, creando una conexión auténtica y duradera.
En un sector tan competitivo como el del diseño de interiores, un logotipo distintivo puede hacer que tu marca sea fácilmente reconocible. Los clientes potenciales asociarán tu marca con calidad, innovación y estilo, facilitando su decisión de compra. Un logotipo bien diseñado puede influir en la percepción de tu marca y atraer a tus clientes ideales.
Uno de los mayores retos a los que se enfrentan los propietarios de negocios de interiorismo es atraer a clientes de calidad. Clientes que valoran el diseño, se comunican de manera efectiva, están abiertos a soluciones creativas y confían en tu experiencia. Son clientes redondos que:
Atrayendo a este tipo de clientes tendrás una base sólida para trabajar en proyectos donde el éxito esté asegurado, permitiéndote crear espacios impactantes y satisfactorios.
Para atraer a este tipo de clientes, necesitas destacar, diferenciarte y posicionarte en el sector. Y aquí es donde el BRANDING entra en juego. Pero el branding no es solo tener un logotipo bonito o un esquema de color que sea tendencia. Consiste en crear una estrategia de marca y además una identidad visual (que incluye un logo entre muchas otras cosas). Es decir, construir una identidad de marca única que refleje tu visión, tus valores y lo que te hace especial para que te elijan a ti frente a la competencia.
El branding efectivo te ayudará a mostrar tu diferenciación dentro del sector del diseño de interiores. Te permitirá comunicar de manera efectiva lo que haces, cómo lo haces y, lo más importante, por qué lo haces. Esto te permitirá destacar en un mercado saturado y comenzar a posicionarte como la opción preferida para tus clientes ideales.
Además, un branding fuerte puede ayudarte a construir una relación más profunda con tus clientes. Puede ayudarte a cultivar la lealtad del cliente, lo que puede llevar a una mayor retención de clientes y a referencias de boca en boca. En última instancia, un branding efectivo puede ser la clave para el crecimiento y el éxito a largo plazo de tu negocio de diseño de interiores.
Si quieres leer un poco más sobre QUÉ ES el branding, Y CÓMO PUEDE AYUDARTE CON TU ESTUDIO DE INTERIORISMO puedes leer este otro artículo pinchando aquí.
En resumen, invertir en un logotipo profesional no es solo una decisión estética, es una inversión en la identidad y el crecimiento de tu negocio. Es la herramienta que te ayudará a destacarte, a conectar con tu audiencia y a construir una marca que perdure en el tiempo.
Así que el primer paso para diseñar tu logo es trabajar en la base de tu marca, en la estrategia de tu marca personal.
Que es el primer paso que se trabaja dentro del BRANDING.
El branding desempeña un papel fundamental al comunicar tu identidad y tu propósito, permite que las personas comprendan tu labor y los valores que representas. Además, contribuye a crear una asociación memorable entre tu marca de diseño de interiores y ciertos conceptos y principios. Como resultado, facilita que tu audiencia te identifique visualmente a través de colores específicos y un logo distintivo.
Si trabajas tu branding vas a:
Si te sientes identificada con lo que he compartido en este artículo, si sientes que tu estudio necesita un logotipo de diseño de interiores único que pueda impulsar tu marca, entonces me encantaría ayudarte. Juntas podemos trabajar para crear un branding que refleje tu pasión, atraiga a los clientes adecuados y te ayude a destacar en el sector del diseño de interiores. No se trata solo de diseñar un logo, se trata de tener una marca que te represente y que resuene con tu cliente ideal. Si estás lista para dar el siguiente paso y transformar tu estudio, me encantaría conocer tu negocio y tus necesidades en una videollamada. Solícita una reunión conmigo por videollamada pinchando aquí.
¡Hablemos de cómo podemos hacer realidad tu visión!
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Después de mucho tiempo pensándolo he decidido comenzar mi propio blog para hablar de una de las cosas que mas me apasionan, el diseño gráfico y el arte, pero desde un punto de vista un poco especial, como freelance que soy. Como diseñadora mi principal objetivo es ayudar a aquellos profesionales de la decoración o el diseño de interiores que llevan ya un tiempo trabajando de forma independiente y creen ya ha llegado el momento de ir un paso más allá con su negocio y sobresalir dentro del sector con una imagen de marca más profesional.
Y hoy quiero contaros un poco más sobre mí y cómo he llegado hasta aquí.
Mis primeros contactos con estas dos modalidades están muy claros, mi niñez. Mi padre ha estado siempre relacionado con el mundo editorial y el arte, ha sido ilustrador de libros juveniles además de artista plástico en sus ratos libres. Y como comprenderéis, siempre he estado rodeada de colores, pinturas, lapiceros y todo tipo de material para crear imágenes.
Siempre había grandes carpetas con papeles de todo tipo y acetatos con tramas y lineas, letras en hojas transparentes que se pegaban al papel cuando presionabas con un lapiz (el famoso Letraset), y tiralíneas y botes de tinta y rotrings en cualquier bote de lápices de la casa.
Recuerdo la llegada a casa del primer ordenador con un programa de dibujo, se supone que iba a ser la revolución y que permitiría pintar cuadros. Tenía una gran tableta sobre la que podías dibujar con un raro lápiz conectado por un cable y que permitía hacer algo más que escribir letras con un teclado, que era lo único que hasta entonces en mi casa se podía hacer con esa pantalla que parecía una tele.
Con esa cantidad de material a mi alrededor y mucha curiosidad de mi parte, era fácil que me dedicara al mundo del arte.
Pero fue con 16 años cuando comenzó mi contacto más directo con el mundo del diseño gráfico. Al poco de comenzar el primer año de Bachillerato Artístico me propusieron trabajar de becaria en una pequeña editorial, unas pocas horas al salir de clase, para familiarizarme con el sector y echar una mano en algunas tareas como escaneado de imágenes, clasificación de cd’s, y esas tareas típicas de becarios. Pero a la vez comenzó a interesarme lo que veía y empecé a estudiar por mi cuenta programas de diseño vectorial para poder llegar a hacer lo que los diseñadores hacían dentro de la editorial. Mi aventura como becaria en aquella editorial duró poco pero sirvió para que desde entonces el diseño me acompañara a lo largo de mi vida.
Comencé a estudiar de forma autodidacta diferentes programas de diseño y retoque fotográfico, hasta que unos años después pude ampliar mis conocimientos en la Escuela de Grabado y Diseño Gráfico de la Casa de la Moneda y en la facultad de Bellas Artes. Estudios que fui compaginando con diferentes trabajos como diseñadora gráfica para la Agencia de Servicios editoriales que mi familia había creado.
Con 18 años publicaron mis primeros libros, una pequeña colección de 4 libritos de pasatiempos para niños pequeños. Muy sencillos pero que sirvieron para que desde entonces mantuviera contacto constante con el mundo editorial, ya fuera maquetando, dibujando, coloreando o creando proyectos de colecciones infantiles.
Unos años más tarde decidí ampliar mis conocimientos de nuevo, y a través de varios cursos y certificados abrí mis horizontes hacia el diseño web, dejando un poco de lado el mundo editorial y centrándome en el Diseño corporativo y la imagen de marca.
Lo que me hizo pasar un par de años como responsable de diseño de una empresa de crowfunding, encargada principalmente de cambiar por completo la imagen corporativa de la empresa y todas sus aplicaciones.
Gracias a dicha experiencia decidí ponerme por mi cuenta como freelance y llegar hasta donde estoy hoy. Disfrutando de mi trabajo como diseñadora gráfica freelance ayudando a decoradores e interioristas a ponerle cara a su marca y a encontrar la imagen que les defina en base a un buena estrategia de branding.
Como diseñadora gráfica disfruto con cada uno de los proyectos en que trabajo, y los hago míos durante el tiempo que están en mis manos.
De forma paralela a mi trayectoria como diseñadora gráfica, he ido trabajando como artista plástica a lo largo de los años, especializándome en grabado y obra gráfica, sin dejar de lado el dibujo y la pintura. Y gracias a ello he ganado algunos premios como el Primer Premio del Concurso «Gran Canaria Series Obra Gráfica 2010» o el Primer Premio “Premio Provincia de Guadalajara de Dibujo”, además de haber participado en ferias internacionales de arte como en AAF. Affordable Art Fair Hampstead en Londres o en AAF. Affordable Art Fair Brussels’12 en Bruselas entre otras (podéis consultar mi bio aquí).
Mi paso por la Escuela de Grabado y Diseño de la Real Casa de la Moneda hizo que me enamorara del grabado, y desde entonces siempre tengo en marcha algún proyecto de obra gráfica. Principalmente me gusta trabajar con el mundo de la fantasía creando mis propios universos a través de la imagen digital sobre la que estampo planchas de grabado de diferentes técnicas (xilografía, punta seca, linografía, …) y sobre la que en algunas ocasiones intervengo manualmente cosiendo o recortando.
Por otro lado la pintura intento no abandonarla, y tener siempre algún cuadro en proceso. La temática que desarrollo es muy distinta, ya que es un tipo de obra más realista y menos fantástica, me encanta reflejar lo que veo a mi alrededor, esas imágenes que cuando paseas por la calle dices: «este momento me encantaría pintarlo».
Si queréis echarle un vistazo podéis verlo en mi web de pintura en este enlace.
Hay quien dice, que el que es artista no puede ser diseñador y viceversa, porque los objetivos de ambos son muy diferentes, pero en mi opinión, y en mi caso en particular, creo que se enriquecen mutuamente. El lado artístico me da la libertad de crear de forma subjetiva, de mancharme y de experimentar con las formas y el color. Y el diseño me aporta ese lado más objetivo y estricto donde lo importante es comunicar y crear con unas pautas muy concretas. Para mí la creatividad es lo importante, sea cual sea su método de expresión. Y ambos se complementan.
Para mí la creatividad es lo importante, sea cual sea su método de expresión.
Las Cuarenta es el resultado final del proyecto realizado por los artistas Enric Bardera, María Bejarano, Helena Losada y Marta Sanz. En él, cada artista, ha ideado un palo imaginario de una baraja que conforman la composición de cuarenta cartas de una baraja española. Cada uno de ellos ha tenido la libertad de elegir el soporte y la técnica artística, de manera que el resultado final presenta una heterogeneidad en los cuatro procesos creativos, pero al mismo tiempo ofrece una visión global en la que cada palo realizado complementa, a su manera, al resto.
Los cuatro artistas de Las Cuarenta han demostrado una sólida trayectoria artística, y su creatividad no es la primera vez que se cruza, habiendo coincidido anteriormente en algún que otro proyecto.
Las obras creadas, cuarenta en total, se han realizado en un formato aproximado al DinA4, pero manteniendo la proporcionalidad con el tamaño real de un naipe de la baraja española. Al margen de cada palo realizado, cada artista ha realizado un comodín con unas dimensiones algo mayores, manteniendo también la proporcionalidad.
Enric Bardera ha escogido Los Planetas para su palo de la baraja y ha ejecutado cada una de sus obras mediante la técnica del collage, combinado la presencia de los astros con recursos visuales de impacto. La Mancha ha sido el palo elegido por María Bejarano para realizar las distintas cartas mediante tintas, que le ha permitido un despliegue cromático intenso con el que, generalmente, se distingue su obra. Helena Losada se ha basado en distintas técnicas artísticas para la realización de su palo, denominado La Grulla. El resultado obtenido ha sido una serie de obras muy delicadas, tanto en su ejecución como en su finalización. Por último, el palo elegido por Marta Sanz ha sido La Casa, en el que, con una combinación cuidada de técnicas mixtas sobre impresión digital y distintos materiales, nos ofrece un bello resultado muy característico de la obra de esta artista.
Además de las obras originales en tamaño A4, está disponible una cuidada edición digital de cada uno de los palos que consta de 15 ejemplares en tamaño A5 impresos con tintas pigmentadas sobre papel Somerset Bockingford de 190 grs.
Por otro lado se ha creado una baraja como tal en tamaño naipe donde se incluyen además de los cuatro palos principales una breve explicación del proyecto y las biografías y statement de cada uno de cada uno de los artistas.
El próximo 11 de enero de 2018 presentaremos el proyecto «Las cuarenta» en el Centro Cultural Galileo de Madrid a las 19 horas. Será la inauguración de la exposición que podrá verse hasta el 9 de febrero de 2018 en ese mismo centro.
Un proyecto en el que cuatro artistas, Enric Bardera, María Bejarano, Marta Sanz y yo misma, nos hemos reunido para diseñar y crear una baraja española artística con nuestro propio toque personal.
En la exposición podrán verse los originales. Un total de 44 obras entre las que se incluyen los cuatro palos de la baraja y cuatro comodines.
Nos gustaría veros por allí.